Lo más destacado de China

Prepárate para tu primera experiencia en tren bala esta mañana. Un viaje de media hora en tren te llevará a Wuxi, antaño una destacada ciudad acuática y ahora una ciudad en auge. Sigue a tu guía en un recorrido a pie por la Zona Escénica de la Ciudad Antigua de Huishan y explora las reliquias culturales, los lugares históricos y la zona escénica de Xihui, llena de preciosos jardines. Deambula por las calles históricas y culturales de Huishan casi como si viajaras en el tiempo. Saca unas fotos épicas, aprende sobre la vida tradicional de este lugar y luego visita el Jardín Jichang, uno de los mejores ejemplos de jardines tradicionales chinos, declarado patrimonio nacional protegido en 1998. Regresa a Shanghai por la tarde. La noche es tuya para que la disfrutes a tu ritmo: ¿por qué no te tomas una copa en uno de los bares de las azoteas de Shanghái y contemplas el bund?

Esta mañana sube al tren bala hacia Xi'an, la capital de la provincia de Shaanxi y la ciudad más grande del noroeste de China. Antaño centro imperial e inicio de la Ruta de la Seda, Xi'an es ahora una ciudad vibrante y moderna, salpicada de numerosos lugares históricos y un gran lugar para explorar. Cuando llegues, únete a tu guía en un recorrido a pie, pasando por las emblemáticas Torres de la Campana y del Tambor: según la leyenda, la Torre de la Campana se construyó para contener a los molestos dragones que causaban terremotos devastadores. Visita el Barrio Musulmán y pasea por las tiendas, los mercados y la Gran Mezquita. Prueba algunos aperitivos callejeros de los carritos locales y comprueba por qué esta zona es conocida por su comida. Para cenar esta noche, prueba algunas tentadoras especialidades locales como el pao mo (caldo de cordero con pan plano), fideos hechos a mano y brochetas de carne.

Hoy viajarás a las afueras de Xi'an y visitarás lo que sin duda es una de las maravillas artificiales del mundo: los Guerreros de Terracota. Aprende sobre este increíble hallazgo arqueológico, descubierto tras permanecer enterrado durante 2000 años, y tómate tu tiempo para conocer a los 1000 guerreros (cada uno esculpido individualmente, con un traje, altura y expresión facial diferentes). Estas estatuas de arcilla que representan soldados, caballos y carros fueron encargadas por el emperador Qin Shi Huangdi como parte de su mausoleo tras ascender al trono en el 264 a.C. Más tarde, regresa a Xi'an y disfruta de una tarde libre. ¿Por qué no te diriges a la calle peatonal del Paraíso Tang, cerca de la Gran Pagoda del Ganso Salvaje? Se trata de una zona ecléctica de la ciudad, llena de luz y sonido y perfecta para disfrutar de la vida nocturna local.

Hoy es un gran día de viaje, así que coge algo de picar y un buen libro para el trayecto. Te trasladarás a la estación de ferrocarril y luego subirás al tren de alta velocidad que te llevará a Pekín. Observa cómo el paisaje cambia de tierras de cultivo y pueblos a ciudades industrializadas y aprovecha para conocer a tus compañeros de viaje durante el trayecto. Cuando llegues a Pekín, sube a bordo de un vehículo privado y conduce hasta el campo, donde pasarás la noche en una pensión familiar, ¡justo dentro de la zona panorámica cercana a la Gran Muralla China! Esta noche es muy recomendable que hagas una pequeña excursión a la Muralla para disfrutar de una inolvidable puesta de sol. ¡Has llegado a una de las Siete Maravillas del Mundo!

Hoy es un día emocionante, ya que visitarás una sección de la Gran Muralla China, una antigua maravilla del mundo y el lugar más emblemático de este país. Pasa algún tiempo explorando, haz muchas fotos y aprende la historia de este poderoso monumento. Increíble obra de ingeniería, la muralla se extiende 6.000 km al oeste de Pekín. Se construyó inicialmente para proteger a los imperios chinos de los invasores del norte. Aunque fracasó, sigue siendo uno de los logros más notables del país y un destino emblemático. Recorre la parte superior de la Muralla durante unas 2 horas, a lo largo de una sección menos visitada por los turistas y una de las más originales de la Muralla -no te sorprendas si incluso sientes que sois los únicos en la Muralla-. Contempla el paisaje de la estructura serpenteando por las colinas casi sin fin en la distancia. Después, despídete de este lugar épico y dirígete a Pekín, la capital y última parada de tu viaje.

Esta mañana dirígete al centro de Pekín y explora la Plaza de Tiananmen, supuestamente la mayor plaza céntrica del mundo y centro simbólico del poder chino. Enmarcada por la Puerta de la Paz Celestial, el Mausoleo de Mao y el Gran Salón del Pueblo, es un lugar de peregrinación para los turistas chinos, que la consideran el corazón de su nación. Desde aquí entrarás en la enorme Ciudad Prohibida, que se construyó hace más de 500 años y ha estado vedada a los plebeyos durante casi todo ese tiempo. Explorarás sus salones y patios y serás testigo de la grandeza de la corte imperial china durante las dinastías Ming y Qing. Por la tarde, disfruta de tiempo libre para explorar por tu cuenta. Quizá puedas visitar el Templo del Cielo antes de reunirte con tus compañeros de viaje para una cena de despedida. No hay mejor forma de celebrar el final de tu viaje que con una comida de pato de Pekín (y quizá una copa o dos).

Como hoy no hay actividades previstas, tu aventura en China llega a su fin. Hay mucho que ver y hacer en Pekín, así que si quieres quedarte unos días más, sólo tienes que hablar con tu agente de reservas.