Cuando llegues a Israel, puedes dirigirte a tu hotel e instalarte. Después, aprovecha para salir a explorar. Prueba la comida callejera local, visita los bulliciosos mercados o quizás simplemente relájate en la playa. Si quieres algunas sugerencias sobre cómo pasar el día, no dudes en preguntar a alguien de nuestro equipo.
Pasa la noche: Jerusalén.